El comercio minorista en Colombia experimentó una disminución en las ventas reales del 3,9% al iniciar el 2024, marcando un comienzo de año desafiante para el sector luego de haber cerrado el 2023 también con una caída en las ventas reales. A pesar de esta tendencia general, las ventas nominales en los grandes almacenes e hipermercados mostraron un incremento del 2,2%, alcanzando un total de $9,1 billones, lo que sugiere una dinámica todavía afectada por la inflación. La cifra desestacionalizada mostró una caída en proporciones muy similares del 3,7%.
El comportamiento por líneas de mercancías reveló variaciones significativas, con 11 líneas registrando variaciones negativas en sus ventas reales, mientras que 8 líneas mostraron variaciones positivas. Entre las líneas con mayor contribución negativa se encuentran Otros vehículos automotores y motocicletas, Vehículos automotores y motocicletas de uso de los hogares, y Artículos de ferretería, aportando en conjunto -4,2 p.p. En contraste, la línea de Productos de aseo personal registró una contribución positiva, destacando la diversidad en el desempeño de diferentes segmentos del mercado minorista, tales como el sector de bebidas (alcohólicas y no alcohólicas) con crecimientos anuales en sus ventas.
En cuanto al empleo, enero de 2024 marcó el primer mes en el que se registró una caída en este indicador, tras dos años consecutivos de crecimiento desde enero de 2022. Este cambio en la tendencia del empleo refleja los ajustes que están realizando los comerciantes en respuesta a las condiciones del mercado y las ventas. A pesar de la caída general, se observó un aumento en el personal permanente y los aprendices, lo que indica un enfoque en la retención de empleados clave y la inversión en el desarrollo de habilidades.
Las perspectivas del gremio de Fenalco para el comercio en 2024 son cautelosas, reflejando la incertidumbre y los desafíos continuos que enfrenta el sector. La Federación Nacional de Comerciantes ha expresado preocupación por la sostenida caída en las ventas y teme que una nueva reforma tributaria pueda impactar negativamente a los empresarios. Sin embargo, existe una expectativa de mejora en las condiciones de acceso al crédito que podría favorecer al consumidor y, potencialmente, impulsar la demanda. A pesar de los retos actuales, el comercio minorista busca adaptarse y encontrar oportunidades para una recuperación sostenida en el transcurso del año.